Meteorología Aeronáutica. Frente Estacionario
Meteorología Aeronáutica. Frente Estacionario.
Ocasionalmente, el flujo de aire a ambos lados de un frente no va, ni hacia la masa de aire frío, ni hacia la de aire cálido, sino que está paralelo a la línea del frente, así la posición en superficie del frente no se mueve.
Cuando el aire frío no se mueve -ni avanza ni retrocede-, nos encontramos ante un frente estacionario. Como el aire frío no progresa, el aire cálido en uno de los lados del frente no se mueve, por lo tanto prácticamente no existen mecanismos que formen tormentas o lluvias en el aire cálido.
Las condiciones típicas en el sector frío de un frente estacionario son: capas de nubes estratiformes y períodos de precipitaciones continuas.
Dada su condición estacionaria, estos fenómenos climáticos pueden persistir por un período prolongado. De hecho, las condiciones típicas de los frentes estacionarios son más parecidas a las de un frente cálido que a las de un frente frío.
En ocasiones, además de precipitaciones continuadas, se pueden formar tormentas a lo largo de los bordes de los frentes estacionarios. La tendencia de este tipo de frentes a permanecer en un lugar durante un período de tiempo, puede producir episodios de fuertes lluvias, resultando incluso en inundaciones. Por lo tanto, no es verdad que los frentes estacionarios estén siempre asociados a condiciones calmas.
En una carta sinóptica, estos frentes se muestran con una línea con triángulos azules apuntando hacia el lado cálido alternados con semicírculos rojos en el lado frío.
Sus características atmosféricas serán similares a las del frente que lo originó, aunque es más probable la ocurrencia de precipitación suave a moderada, salvo que persistirán en la región que ocupan, ya que el frente no se traslada.
Si se mueve muy poco, se llama frente semiestacionario.
Es aquel que marca la separación entre dos masas de aire, entre las que no se manifiesta desplazamiento de una respecto de la otra. La sección es similar a la de un frente cálido